Rocafuerte, lo nombro gobernador de Guayaquil. Flores aprovechó el impulso renovador de Rocafuerte y tanto en la economía como en la educación continuó con la obra de su antecesor.
En 1843 Flores se declaró Jefe supremo del país pues el congreso no se podía reunir y el general aprovechó esta circunstancia para mantenerse em el poder.
Convocó entonces a una nueva asamblea constituyente, a la que presentó un proyecto de constitución hecho a su medida. El proyecto presentado por Flores a su vez otorgaba la nacionalidad Ecuatoriana a los naturales de otros países colombianos, y mantenía la necesidad de tener tener propiedades por un monto mínimo para gozar de derechos de ciudadanía.
La constitución fue aprobada y recibió por parte de la oposición a Flores el apelativo de "Carta de la Escalvitud"
El mismo Vicente Rocafuerte estaba a la cabeza de la oposición: primero, dentro de la asamblea constituyente; luego desde el extranjero se formaron varios grupos que buscaban la destitución de Flores en Quito. El pueblo en su mayoría protestaba por el impuesto personal de tres pesos que todos los habitantes del país debían pagar.
El descontento general terminaría con la segunda presidencia de Flores.
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